Ride the Ducks Trial Día 30: Los Hiraokas

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Día 30 del juicio: lunes 26 de noviembre de 2018

Sube las escaleras. Ver a la familia Hiraoka. Hace un año hice dos viajes en el espacio de dos meses a Japón para visitarlos. El primer viaje fue una chapuza porque Scott no se dio cuenta de que sólo se pueden tomar declaraciones en la Embajada de los Estados Unidos en Tokio. En el segundo viaje, la declaración se llevó a cabo en la lúgubre sala de conferencias de la embajada. 

El Dr. John Clark, el testigo laico, está con ellos. Salúdelos. Entra en la sala. Jesica me dice que el intérprete se está retrasando. Luego me dice que nuestros tres testigos para el martes están siendo eliminados. Estas son noticias increíbles a primera hora de un lunes por la mañana.

Entra el juez. Tad presenta a un nuevo abogado de Floyd Pflueger Ringer. Por lo visto, el Ayuntamiento ha decidido que quizá no debería hacer todo esto internamente. Inclínate sobre la pared de lego y susurra: así que seguís necesitando más abogados. El jurado entra. El Juez Shaffer dice que llamen a su próximo testigo.

El intérprete y la Dra. Hiraoka suben al estrado. Ella está un poco nerviosa. Tarda unos minutos en empezar a hacerlo todo bien. El juez S está un poco exasperado con ella.

Al final del día nos encontramos con el Dr. Hiraoka y sus dos hijos, Kenichiro y Yousuke. Son tranquilos, prístinos, testigos. Se sientan con las manos cruzadas en el regazo. Las piernas simétricamente juntas. El único movimiento se produce en sus cabezas cuando se giran hacia el intérprete. Sus respuestas son sin ninguna elaboración junto con el pronunciamiento: eso es todo.

P ¿Puede describir lo que sintió. 

R Estaba preocupado. Eso es todo.

P ¿Qué le preocupa de X...

R Tiene un problema en las piernas. Eso es todo.

Lo que me resulta interesante durante el testimonio de la familia Hiraoka, son las acciones infructuosas de los acusados. Son tan malas. Y sin embargo, persisten.  

En el caso de Yousuke, el hijo menor de 23 años, JackG intenta impugnarlo por decir que le da miedo conducir y que ahora sólo lo hace unas dos veces al mes. Jack va a su declaración donde dice que conducía 4 veces a la semana debido a su situación de vida. Oooh Jack piensa que ha ganado puntos. Hasta que en la redirección Yousuke señala que la declaración se celebró antes de que se trasladó a su residencia actual, que está en un lugar diferente.

En el caso de Keni, el hijo mayor de 27 años al que le arrancaron los dos dientes delanteros y tiene coronas, Scott empieza la cruzada diciéndole que sonría al jurado para que vean lo bien que le quedan los dientes. Hay algo ligeramente ofensivo en esta petición. Como si le estuviera pidiendo que hiciera un truco. Keni sonríe y el jurado le devuelve la sonrisa.

Las preguntas del jurado son tan uniformemente compasivas que uno pensaría que la defensa podría querer reconsiderar sus estrategias. Pero tienen un plan de juego y se aferran a él. Me pregunto por millonésima vez cuánto pagan a sus asesores del jurado para que no hagan nada.

El reloj marca las cuatro. El jurado se retira. El juez Shaffer dice: bueno, parece que vamos por buen camino... Tendremos que lidiar con la intérprete un día más (para Sonoko) y luego le diremos adiós porque es muy lenta. 

Se da la vuelta y sí. La intérprete sigue en la sala con la boca ligeramente abierta mientras escucha al juez.