Temporizador especial de Paul Luvera
Paul Luvera llevó un gran caso hace unos meses. Y ganó. A la edad de 78 años.(Aquí está su biografía).
He admirado (casi adorado) a Paul a lo largo de los años por su habilidad en el juicio. Varias veces he ido a verlo. Lo que me llamó la atención fue la forma en que merodeaba con tanta gracia por la sala del tribunal. Y lo poseía.
Durante los últimos casi 30 años, la convención anual de abogados litigantes de nuestro estado ha contado con el Seminario Luvera. Paul moderó el programa basado en presentaciones de diez minutos. Si te pasas - DING. El temporizador se apagaba. Si no hacías un buen trabajo - ouch. E incluso si lo hacías bien, nunca se sabía cómo reaccionaría Paul. Todo este miedo, incertidumbre y dominio se combinaron para crear un programa muy esperado.
La primera vez que hablé en el seminario, fue sobre el expolio de pruebas. Mi objetivo no era simplemente sobrevivir a la experiencia. Quería impresionar a Paul.
A lo largo de los años, Paul me ha enviado libros y citas o artículos que cree que me van a gustar. Siempre está aprendiendo, pensando y queriendo crecer más.
Este año, Paul decidió poner fin a su reinado en el seminario. La asociación me invitó a hacerme cargo del seminario denominado permanentemente Luvera. Esto es lo que Paul escribió inicialmente:
"...Me sentí muy halagado por el nombre del programa y encantado de que hicieras el programa en la convención en mi lugar. Le dije a Gerhard (el Director Ejecutivo) que tenías esa capacidad de dirigir el programa con observaciones y consejos que a la gente le gustaría. Sabes que admiro tu búsqueda continua para mejorar tus habilidades, tu coraje para afrontar los retos y tu potencial para ser aún más grande como abogado litigante. No soy de los que hacen falsos elogios y tú has estado en mi lista corta de abogados de los que espero grandes cosas incluso con un techo de cristal en esta profesión."
Hoy en el correo había un paquete de Paul. Un temporizador de cuarzo Sunbeam amarillo vintage con una nota:
"Hola Karen - Hanna Reisner, la primera directora ejecutiva de la WSTLA me regaló este temporizador hace más de 25 años para cronometrar las charlas. Le transmito este regalo que he utilizado en todos los seminarios de Luvera de la convención, o si lo prefiere, ¡para cocinar en casa!"
A veces necesito pellizcarme. Este es uno de esos momentos.
P.D: Aquí está su blog.